Nadie te hace nada, todo te lo haces a ti mismo y todo es para ti.
Nos relacionamos a través de un filtro de colores, de sabores y sobre todo de ilusiones. Ponemos el foco siempre fuera de nosotros, intentando culpabilizar al exterior de lo que ocurre en nuestro interior, para poder quitarnos parte de responsabilidad sobre nuestros actos.
Somo victimas de nuestro propio desconocimiento emocional y caminamos inmersos en la ilusión de creer que los demás nos hacen daño.
Las personas son tus espejos y maestros, sólo vienen a mostrarte lo que todavía no has sanado, por lo tanto, los necesitas. Necesitas de ellos como un niño necesita su madre, sin ellos no podrías hacer consciente lo que tienes en tu inconsciente.
No podrías evolucionar y ver las heridas que aún continúan en tu interior. Cuanto más tiempo te quedes en la posición de inocente o de víctima, más demorarás en tu florecimiento.
Si quieres construir relaciones sólidas ,llenas de armonía, respecto y que te hagan crecer como persona ocúpate de tus reacciones.
Tienes que pulirte y fortalecer tu poder interior, tu valía tu estima, hasta que logres no reaccionar tal cuál un títere emocional cada vez que te ofenden, y saber devolver con sabiduría y compresión toda conducta ajena errónea.
Ellos te están ayudando a que veas, te liberes y crezcas ,pero si sigues preso en la terquedad de seguir mirando hacia fuera buscando responsables por tu sufrimiento, tu vida será una gran carga de llevar.
Estas personas, situaciones tóxicas se irán solas cuándo hayan cumplido su misión, es decir, cuando finalmente hayas sanado tu corazón herido.
Date cuenta, toma consciencia.
EL CAMINO DE LA COMPRENSIÓN ERES TÚ MISMO.
GRACIAS GRACIAS GRACIAS
~ vive salvaje y libre ~
BALONES FUERA