Un día decidí dejar de culparme y hacer algo más constructivo, perdonarme y soltar algunas cosas de mi pasado que aún me pesaban.
Cuando no llegas a comprender una situación, nunca terminas de superar lo que pasó, cargas en tu corazón con el resentimiento, el rencor y la rabia; sentimientos que te intoxican desde dentro y que a la larga sólo traen consigo amargura y frustración.
Aprender a ver las cosas de otra manera nos libera. Llevamos una pesada carga, que nos hace sufrir.
Elegir de nuevo nos libera. Cuando condenamos a otro con un juicio, nos estamos condenando a nosotros mismos. El rencor y el resentimiento, que en realidad sólo son juicios, nos mantienen prisioneros.
No tenemos paz, no descansamos, no dormimos y todo no para de ir mal en nuestra vida. Nosotros somos el problema y la solución.
Debemos elegir ser feliz en vez de querer tener razón. El problema ya sólo existe en nuestra mente.
Al comprender sanamos la percepción, dejamos de juzgar, sin juicio no hay ni culpa ni condena. Quedamos libres.
Elegir es soltar, deja ir, no aferrarnos al pasado. En definitiva sólo nos estamos castigando a nosotros mismos. Siempre hicimos las cosas lo mejor que sabíamos, de acuerdo a nuestro estado de conciencia.
La culpa nunca arregló nada, nunca trajo paz. Nunca libero a nadie.
Ver para entender, entender para comprender.
GRACIAS GRACIAS GRACIAS
~ vive salvaje y libre ~
CUANDO MADURAS